SOLOMILLO AL WHISKY

Hola de nuevo, vuelve a hacer bastante tiempo que no publico nada, pero como os digo muchas veces cocinar sigo cocinando y eso hace que se me acumulen las recetas, no me gusta publicar varias entradas el mismo día pero alguna vez lo tendré que hacer, sino el cajón de recetas es cada vez más gordo.

Hoy toca una receta de las buenas,  he ido buscando ideas de internet y la he personalizado un poquito. Aunque el origen de buscarla fueron las vacaciones de este verano: unos buenos amigos nos llevaron a cenar una sartenada de huevos a Montilla de Córdoba a la cervecería Don Ramiro Gambrinus, un lugar muy bonito incluso para ir con niños y entre las tapas que elegimos nos pusieron este solomillo, estaba exquisito, y decidí que en cuanto llegara a casa me pondría manos a la obra.
Está claro que no me ha salido como aquel, pero creo que con la práctica seguro que cada vez saldrá mejor. No penséis que me ha salido malo, que va, está buenísimo , al menos para mi paladar.

Bueno ya no me enrollo más y ahí va el listado de ingrediente que son muy sencillos:

• un solomillo de cerdo
• 4 dientes de ajo
• 200 ml. de whisky
• 200 ml. de caldo de pollo
• sal
• pimienta
• aceite
• 1 cucharada sopera de harina de maíz (maicena)
• 30 gr. de mantequilla
• una cucharada de postre de orégano

Elaboración:

 

Cortamos el solomillo en medallones de 1'5 o 2 cm cada uno y salpimentamos. Incorporamos aceite en una cazuela lo suficientemente grande para que quepan todos los medallones y los doramos a fuego fuerte por los dos lados para que se sellen y así queden los jugos dentro, los sacamos y reservamos.

En el mismo aceite ponemos a dorar los ajos fileteados y cuando empiecen a dorar incorporamos el whisky para que reduzca. CUIDADO!!!! apagar el extractor o campana porque esto va a flambear!!!

Durante unos dos minutos más a menos a fuego fuerte el whisky reducirá y se apagará la llama, entonces es el momento de incorporar la mantequilla, el caldo y el orégano. Dejamos que haga chup chup unos tres o cuatro minutos e incorporamos la maicena, OJO, para que quede bien disuelta hay que mezclarla con un poquito de caldo que tendremos reservado a temperatura ambiente y removemos bien hasta que la harina se disuelva.  Lo echamos en la cazuela e incorporamos el solomillo y dejamos reducir hasta obtener la textura deseada de salsa.

Ahora ya sólo queda servir y comer

Espero que os guste.

Aquí estamos justo antes de que nos trajeran la comida.